miércoles, 30 de mayo de 2012

¿Cómo podemos motivar a los niños hacia la pintura?

Para empezar, hay que dejar claro que la pintura no tiene una edad establecida, es decir, no define una edad por lo que a partir del momento en el que un bebé puede sujetar objetos con la mano, puede empezar a hacer garabatos, dibujar y pintar.
En estos primeros años la pintura sí que debe estar bajo vigilancia por un adulto por la edad temprana del niño.
La pintura se considera una de las actividades más gratificantes para el niño o la niña.




Existen muchos recursos para motivar al niño con la pintura. Algunas de ellas son, por ejemplo:
- Libros especialmente preparados para pintar.
- Libros que incluyen espumas para que los niños apliquen nuevas técnicas.
- Libros que incluyen pinturas adecuadas para que los niños pinten con las manos y dedos.
Estos recursos pueden ser apropiados para los primeros años.


A partir de 5 o 6 años, los niños ya quieren crear libremente y de forma personal por lo que se les puede comprar materiales más variados y diferentes para crearles un ambiente más artístico.








Por lo tanto, los padres pueden utilizar diferentes materiales en la pintura de los hijos. Estos materiales pueden ser desde las cotidianas hojas de papel hasta tejidos y lienzos.
Lo importante es no limitar la creatividad y la imaginación del niño o la niña, hay que dejarles que vean las cosas como ellos quieran.


La pintura es arte y como tal, no debe ser una actividad repetidora y que esté condicionada a antiguos patrones.


Los cursos de pintura infantil también son un recuso recomendable y sugerente para despertar la motivación en los niños. Con estas clases pueden aprender a utilizar variedad de materiales y técnicas.


Otra forma es llevarles a visitar exposiciones de diferentes pintores. En un mismo museo puede haber talleres y juegos relacionados con la pintura que pueden hacer que aumente la motivación de los más pequeños.


La idea de los padres en pensar que los museos no son espacios para los niños es errónea, ya que los niños imitan los comportamientos de los más mayores y si éstos están en silencio, ellos buscarán el silencio.





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